Saltar al contenido principal

Aspectos destacados

  • Aumento de la demanda estudiantil. El número de estudiantes móviles en España crecerá en torno a 175.000 de aquí a 2029–2030, intensificando la presión sobre la oferta de alojamiento. El coste de estudiar y vivir en España —hasta un 50% más bajo que en otros destinos europeos— continúa reforzando su atractivo.
  • Persistencia del déficit estructural. España afronta una brecha estructural creciente, con un stock PBSA previsto de 138.000 camas en 2029–2030 frente a una demanda insatisfecha core de 335.000, lo que sigue situando la oferta muy por detrás de las necesidades reales.
  • Oportunidades significativas de cara a 2030. El fuerte crecimiento de la demanda y el ensanchamiento del gap de oferta generan oportunidades sustanciales hacia 2030. Alcanzar una tasa de cobertura del 20% requeriría entre 15.000 y 24.000 millones de euros de inversión adicional, impulsando el desarrollo a largo plazo y la consolidación del sector en un contexto en el que España se mantiene como uno de los destinos estudiantiles más atractivos de Europa.
  • La actividad inversora se acelera. La inversión PBSA en España alcanzará un récord de 1.700 millones de euros en 2025, impulsada por grandes operaciones y un creciente apetito inversor. Paralelamente, el interés en la compra de suelo y el desarrollo continúa aumentando, reforzando la posición de España como segundo mayor mercado PBSA de Europa.

Creciente demanda estudiantil

La demanda de alojamiento para estudiantes en España continúa fortaleciéndose, respaldada por el crecimiento de las matriculaciones y el aumento de la movilidad. En el curso 2024/25, las universidades españolas registraron alrededor de 1.490.000 estudiantes presenciales, un incremento anual del 3,3%, el más alto de la última década. Las matriculaciones de estudiantes internacionales presenciales también aumentaron con fuerza, un 10% interanual, consolidando a España como un destino académico global cada vez más atractivo.

Los estudiantes móviles ya representan más del 42% del total de matriculados, y las proyecciones apuntan a alrededor de 175.000 estudiantes móviles adicionales para 2029–2030. Unido a la ventaja competitiva de España —donde los costes de estudio y vida pueden ser hasta un 50% inferiores a los de otros grandes destinos europeos— este crecimiento sostenido continúa intensificando la presión sobre la oferta de alojamiento en las principales ciudades universitarias.

Déficit estructural de oferta

La oferta PBSA en España sigue muy por debajo de la demanda, con una tasa nacional de cobertura en torno al 7%, muy alejada de los niveles de los mercados europeos más maduros. Aunque la actividad promotora está aumentando, el pipeline actual —aproximadamente 26.000 camas— no es suficiente para cerrar la brecha existente.

De cara a 2029–2030, se espera que el stock PBSA alcance las 138.000 camas, una cifra que queda muy lejos de la demanda insatisfecha core estimada en 335.000 camas para ese mismo periodo. Este desequilibrio persistente refleja años de insuficiente desarrollo en los principales hubs universitarios, donde el crecimiento de la movilidad estudiantil continúa superando a la oferta de nuevas residencias.

Para alcanzar niveles de cobertura similares a los mercados líderes en Europa serían necesarios entre 15.000 y 24.000 millones de euros adicionales en inversión y un ritmo de entregas significativamente mayor. Hasta que ese ajuste se produzca, la falta de oferta seguirá siendo un rasgo estructural del mercado PBSA en España.

Aceleración de la actividad inversora

La actividad inversora en el sector PBSA en España está creciendo con fuerza, respaldada por unos fundamentos sólidos y por la creciente confianza de los inversores. Se prevé que el volumen de inversión alcance un récord de 1.700 millones de euros en 2025, situando a España como el segundo mayor mercado PBSA de Europa. El PBSA representará el 38% de la inversión Living en España y el 11% del total del mercado inmobiliario, reforzando su creciente relevancia estratégica.

El mercado también está ganando profundidad y diversificación, con nuevos actores nacionales e internacionales ampliando la base de capital disponible. Además de las grandes operaciones, el interés inversor por la compra de suelo y las oportunidades de desarrollo continúa aumentando, reflejando la confianza en los fundamentos del sector y en su potencial de crecimiento a largo plazo.